Hongos mágicos. No, de los otros.
Tremenda explosión de color miyazakiana en formato de enorme y preciosérrimo álbum (de un total de dos) financiado vía Spaceman Project. Una de esas historias mágicas que que son siniestras pero bonitas al mismo tiempo: personas sencillas en entornos rurales luminosos cuyas vidas se ven alteradas cuando la Maldición (que se presenta en forma de hongo/varita mágica en el dedo índice) se adueña de sus seres queridos. Habrá que luchar contra ella con la ayuda de... ¿Magos? ¿Dioses? ¿Con guadañas? ¿Y hay brujas malas obsesionadas por la moda de por medio? Una locura visual a la que la paleta de color se le queda corta.
Cartoné. 176 páginas. 28€